
Un arranque de curso con dos versiones
El curso escolar 2025-26 comenzó en la provincia con 59.859 alumnos y más de 5.000 docentes, según los datos de la Junta de Castilla y León. El delegado territorial, Eduardo Diego, destacó en su comparecencia el crecimiento del alumnado (+0,56 %), la incorporación de 119 profesores y la ausencia de cierres de escuelas rurales. Sin embargo, esta mañana el delegado de CSIF Enseñanza en León, Javier Ampudia, ofrecía en los micrófonos de Es la Mañana de León en Es Radio, con Arturo Martínez, una visión mucho más crítica: “Seguimos con un 19,5 % de interinidad, cuando la ley marca el 8 %. Es un problema estructural cercano a lo imposible de resolver”.
La interinidad, el gran talón de Aquiles
Ampudia explicó que la tasa de interinidad en León se ha reducido levemente desde la pandemia gracias a los procesos de estabilización, pero ha vuelto a crecer hasta situarse en cifras muy alejadas de lo comprometido con Europa. El resultado es que cientos de docentes siguen encadenando contratos temporales durante años, sin poder consolidar una plaza fija. El sindicato denuncia que este problema no afecta solo a jóvenes recién titulados, sino a profesores con décadas de experiencia que no logran estabilizarse. Además, la Junta convoca menos especialidades de las necesarias, lo que agrava la falta de profesorado en ámbitos clave como Matemáticas, Informática o Electrónica.
Un sistema de oposiciones desfasado
Otro de los puntos de fricción señalados por CSIF es el modelo de acceso a la función pública. Los temarios que rigen las oposiciones datan de 1993, algo que el sindicato considera inaceptable en plena era digital. “Imagínese un informático teniendo que estudiar un lenguaje de programación que ya no se utiliza. Estamos en plena era digital y seguimos con temas caducos”. La consecuencia, según explicó, es un sistema que provoca frustración en miles de docentes, con aprobados que no obtienen plaza y convocatorias insuficientes que dejan sin cubrir puestos estructurales.
Infraestructuras eternamente pendientes
Mientras el delegado de la Junta anunció inversiones para el IES de Villaquilambre y el conservatorio de León, el delegado del CSIF recordó que son proyectos largamente prometidos sin avances reales. El sindicato denuncia que las obras llevan años dilatándose y que algunos centros educativos presentan un estado preocupante tras más de tres décadas sin reformas. Especialmente grave es la situación del colegio Sagrado Corazón, que atiende a alumnos con mayor diversidad funcional y que sigue esperando la construcción de nuevas aulas. Según Ampudia, la alternativa que se baraja pasa por levantar carpas o barracones provisionales. “Nos engañan con el instituto de Villaquilambre y con el conservatorio: el terreno está, las promesas también… pero las obras no llegan”.
Currículo competencial y exceso de burocracia
CSIF también puso el foco en la implantación de la LOMLOE y el sistema de evaluación competencial. El sindicato reconoce la necesidad de orientar la educación hacia las competencias, pero denuncia que la aplicación práctica está suponiendo una sobrecarga burocrática insostenible para los docentes. Informes interminables, fichas justificativas y una promoción automática del alumnado hacen que los profesores vean cómo muchos estudiantes llegan a Bachillerato o incluso a la Universidad con graves carencias, desde faltas ortográficas hasta dificultades de expresión oral. “Hacemos un trabajo cuatro o cinco veces mayor para llegar al mismo sitio. Y muchos alumnos llegan a Bachillerato o la Universidad con carencias graves”.
Prioridades sindicales
El delegado de CSIF concluyó la entrevista con un mensaje claro: es necesario reducir la interinidad con más plazas estables, cumplir de una vez las promesas de infraestructuras y aligerar la burocracia que desgasta al profesorado. “La mochila de la Junta está llena de anuncios, pero falta lo esencial para garantizar calidad y estabilidad”.