Fuerzas de seguridad y dirigentes polóticos inspeccionan un el material intervenido.
Fuerzas de seguridad y dirigentes polóticos inspeccionan un el material intervenido.

La 'Operación Marco Polo' conducida por la Guardia Civil ha resultado en la neutralización de un peligroso taller y depósito de explosivos localizado en un bloque de viviendas en Burgos. El lugar, situado en la plaza San Bruno del barrio de Gamonal, albergaba más de 60 kilos de precursores químicos para la fabricación de explosivos.

El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, presentó los resultados de la operación, que conllevó la detención de un individuo de 31 años por delitos de posesión de explosivos y tráfico de drogas. Los efectivos realizaron tres registros, dos en viviendas y uno en un garaje, donde se encontraron los precursores de explosivos junto con 200 tipos de productos químicos, medio kilo de mezclas explosivas ya listas para ser detonadas, y una significativa cantidad de speed y otros estupefacientes.

El detenido, apasionado por los explosivos y con conocimientos especializados adquiridos en su experiencia laboral previa en empresas del sector, presuntamente manipulaba y almacenaba el material peligroso sin medidas de seguridad adecuadas. Además, se le relaciona con antecedentes judiciales por violencia doméstica y quebrantamiento de condena.

El sospechoso, investigado desde septiembre de 2023 y vinculado con adquisiciones ilícitas de materiales explosivos, fue puesto a disposición judicial ayer lunes, resultando en su inmediato ingreso en prisión. La investigación fue dirigida por el Juzgado de Instrucción número 4 de Burgos y contó con la participación del Grupo de Información, Policía Judicial, Grupo Cinológico, USECIC y Seguridad Ciudadana de la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos.