
El nuevo portavoz del grupo municipal de VOX en el Ayuntamiento de Salamanca, Alejandro Miguel Pérez de la Sota, ha expresado sus sospechas sobre un posible uso indebido de los fondos municipales destinados al grupo, una situación que, según él, habría sido consentida por su antecesor en el cargo, Ignacio Rivas.
Pérez de la Sota ha explicado que, a pesar de sus reiterados intentos, no había podido acceder a la información sobre el destino de esta dotación anual que el Ayuntamiento entrega para sufragar la actividad de los distintos grupos municipales en el Consistorio.
Según ha indicado Pérez de la Sota, la única forma de obtener esos datos era asumir la portavocía, un relevo que se llevó a cabo el lunes en una reunión marcada por la tensión.
Una destitución con la que culminan meses de desavenencias entre un grupo de militantes de VOX en Salamanca, encabezado por Pérez de la Sota y muy crítico con la dirección nacional del partido y otro, más afín a las directrices enviadas desde Madrid y al frente del cual se encuentra el ahora apartado Ignacio Rivas.
Por su parte desde la Dirección del partido en Salamanca han calificado esta acción de los dos ediles como de “secuestro del grupo municipal”, asegurando en un comunicado estos ediles, que ya no se encuentran afiliados a la formación verde, “actuaron de manera unilateral y completamente al margen del partido”, anunciando que tomarán las medidas que sean necesarias para revertir esta situación.