A partir del 1 de enero de 2026, los conductores deberán decir adiós definitivamente a los tradicionales triángulos de emergencia. La Dirección General de Tráfico obliga a sustituirlos por las balizas luminosas V-16, unos dispositivos que se colocan en el techo del vehículo y emiten una señal luminosa visible para alertar al resto de usuarios de que un coche está inmovilizado en la vía.
¿Por qué se toma esta medida?
La DGT justifica esta medida por motivos de seguridad vial, principalmente para reducir los atropellos que se producen cuando los conductores bajan del vehículo para colocar los triángulos a varios metros de distancia.
La coordinadora provincial de Tráfico en Valladolid, Inmaculada Matías, ha recordado en declaraciones a esRadio que, en 2026, los triángulos dejarán de ser válidos por completo y ha confirmado que no habrá prórrogas para retrasar la entrada en vigor de la norma.
Para cumplir la normativa, las balizas deberán estar homologadas y contar con conectividad. Estos dispositivos incorporan un sistema de geolocalización que envía la posición del vehículo detenido a la plataforma DGT 3.0, permitiendo alertar al resto de conductores a través de navegadores, aplicaciones de movilidad o paneles informativos.
Matías ha querido aclarar que la baliza solo transmite la ubicación cuando se activa y que no permite conocer la velocidad del vehículo. Tampoco sustituye a llamadas de emergencia o a sistemas como el eCall, que siguen siendo complementarios.
Críticas de la Guardia Civil
Pese a las explicaciones de Tráfico, la obligatoriedad de la baliza V-16 ha generado polémica. La Asociación Unificada de Guardias Civiles ha solicitado que no se eliminen completamente los triángulos de emergencia.
Su coordinador en Valladolid, José Manuel Martín, considera que en determinadas situaciones -como curvas muy cerrada - los triángulos siguen siendo útiles y defiende la posibilidad de combinar ambos sistemas.
Además, la AUGC recuerda que se trata de una medida exclusiva de España y que no responde a ninguna directiva europea, ya que en otros países el uso de balizas es opcional.
¿Y qué dicen los conductores?
La medida tampoco convence a muchos conductores. En esRadio se ha preguntado a varios usuarios, la mayoría de los usuarios reconoce que la baliza V-16 no les genera confianza y considera que la información sobre su funcionamiento y obligatoriedad ha sido insuficiente.
¿Cuáles son las multas?
No disponer de una baliza homologada se considera como una infracción leve y puede acarrear una multa de 80 euros. Una cuantía que puede verse reducida la mitdad a través del prontopago.
¿Qué vehículos deben llevarla?
El dispositivo debe llevarse en cada vehículo, ya sea un coche, una furgoneta, un camión, etc. La excepción son las motos, ciclomotores, bicicletas y vehículos especiales (vehículos agrarios, de obra, grúas y similares).
La recaudación estatal
En un país con más de 34 millones de turismos matriculados y un precio medio de unos 40 euros por baliza y un 21% de IVA, su implantación podría suponer una recaudación superior a los 285 millones de euros.