
Salamanca ha vuelto a convertirse en un centro de referencia en la investigación contra el cáncer. La ciudad acoge esta semana el XVII Simposio Nacional sobre Bases Biológicas del Cáncer e Innovación Terapéutica, donde expertos de toda España debatieron sobre los principales avances científicos y el futuro del tratamiento oncológico.
Una de las ideas más repetidas durante el encuentro fue la visión optimista que maneja la comunidad científica de cara a las próximas décadas. Según el oncólogo Juan Jesús Cruz, catedrático de la Universidad de Salamanca, "el rumbo de la oncología es claramente esperanzador; estamos cerca de una etapa en la que prácticamente todos los tipos de cáncer contarán con un tratamiento eficaz".
Cruz recordó que en las últimas décadas se ha logrado aumentar la supervivencia media de los pacientes de forma notable. “En los años ochenta hablábamos de tasas de supervivencia del 30 o 40 %. Hoy, esa cifra se acerca al 70 %. Y no se debe a milagros, sino a investigación rigurosa, ensayo clínico y prevención", afirmó.
La inmunoterapia gana protagonismo
Uno de los avances más destacados es la aplicación de la inmunoterapia en fases tempranas. La doctora Edel del Barco, jefa de Oncología Médica en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, señaló que “cada vez estamos utilizando estos tratamientos con mayor anticipación, incluso antes de la cirugía, y los resultados están siendo muy positivos”.
Del Barco añadió que “la inmunoterapia ha pasado de ser una opción complementaria a convertirse en uno de los ejes fundamentales en el abordaje de varios tumores, especialmente cuando se detectan a tiempo”.
Salamanca, núcleo de investigación oncológica
El simposio también sirvió para reconocer el papel de Salamanca en el desarrollo científico en este campo. El Centro de Investigación del Cáncer, vinculado a la Universidad de Salamanca y al CSIC, es uno de los focos más activos en ensayos clínicos a nivel nacional. España ocupa un lugar destacado en el contexto europeo de investigación oncológica, por detrás solo de Estados Unidos y China en volumen de ensayos clínicos.
La prevención, clave para llegar a 2040
A pesar de los avances, los especialistas fueron claros al recordar que el progreso terapéutico debe ir de la mano de una apuesta decidida por la prevención. “Reducir factores de riesgo como el tabaco, el alcohol, la obesidad o el sedentarismo es igual de importante que disponer de buenos tratamientos”, advirtió el doctor Cruz.
También hubo espacio para advertencias sobre las pseudoterapias. Los expertos alertaron del riesgo que suponen los tratamientos alternativos sin base científica, que pueden poner en peligro la vida de los pacientes al retrasar el inicio de terapias eficaces.
Un futuro más cercano de lo que parece
Con todas estas líneas de avance abiertas, los investigadores consideran que el objetivo de lograr una tasa de curación mucho mayor está más cerca de lo que se pensaba. El propio Cruz lo resumió con una frase que marcó el tono de las jornadas: “El cáncer no va a desaparecer, pero sí vamos a ser capaces de ganarle la batalla en muchos más frentes”.