Narciso es todo lo contrario a lo que su nombre hace referencia. Y eso que tiene motivos deportivos para presumir de una trayectoria espectacular y al alcance de pocos. A los 14 años se metió en un canoa y ya no pararía hasta que el reloj del tiempo le dijo basta. Hasta entonces, Campeonatos de Europa del Mundo y por supuesto la gloria de subir a un podium a recoger una medalla de bronce en los Juegos de los Ángeles. El vallisoletano es por derecho adquirido, uno de los grandes del Deporte en la ciudad que cruza un río que ha surcado millones de veces para desde ahí acabar alcanzando la gloria

Ver más Cómo hemos cambiado