Salamanca ha acogido este martes el IX Encuentro Nacional de Escuelas de Segunda Oportunidad, un foro que ha reunido a casi 400 participantes entre profesionales de la educación, responsables institucionales y entidades sociales. El evento, celebrado en el Palacio de Congresos, ha convertido a la ciudad en referente nacional en políticas de reintegración educativa y laboral para jóvenes que abandonaron sus estudios o que no han logrado acceder al mercado laboral.
El encuentro ha sido promovido por la Asociación Española de Escuelas de Segunda Oportunidad, con la colaboración de las entidades locales Santiago Uno y Fundación Juan Soñador, que gestionan centros de este tipo en Salamanca y Castilla y León.
Un modelo que da resultados
Las Escuelas de Segunda Oportunidad (E2O) trabajan con jóvenes de entre 15 y 29 años que se encuentran fuera del sistema educativo y sin empleo, ofreciéndoles formación adaptada, orientación laboral y acompañamiento personal. Desde su creación, el modelo ha logrado cifras significativas: más de dos tercios del alumnado finaliza su paso por estos centros con un contrato de trabajo o retomando sus estudios.
Durante la jornada se han celebrado talleres, mesas redondas y espacios de reflexión en torno a la importancia de personalizar los itinerarios formativos, reforzar la implicación del tejido empresarial y fomentar una visión integradora del sistema educativo.
El respaldo de las instituciones
La inauguración oficial ha contado con la participación de la vicepresidenta de la Junta de Castilla y León y consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, quien ha reafirmado el compromiso del Ejecutivo autonómico con esta red de centros. “Las Escuelas de Segunda Oportunidad son una herramienta clave para evitar que miles de jóvenes queden fuera del sistema. Estamos trabajando para consolidarlas y ampliar su alcance”, ha señalado.
Por parte del Ayuntamiento de Salamanca, la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Miryam Rodríguez, ha destacado que la ciudad mantiene una firme apuesta por la cohesión social y por políticas que garanticen la igualdad de oportunidades. “Salamanca es una ciudad comprometida con quienes más lo necesitan. Este tipo de iniciativas encajan con nuestra vocación de acompañar a cada joven en su proceso de desarrollo personal y profesional”, ha afirmado.
Vidas que cambian
Más allá de los discursos institucionales, el protagonismo ha sido para los jóvenes. Algunos de ellos han compartido en público sus experiencias, narrando cómo las E2O han supuesto un punto de inflexión en sus vidas. Desde historias de abandono escolar hasta trayectorias marcadas por la desmotivación, los testimonios han coincidido en algo: la segunda oportunidad ha llegado gracias a una atención personalizada, entornos formativos más cercanos y una nueva forma de entender la educación.
Salamanca como referencia nacional
Este foro nacional consolida a Salamanca como un punto clave en la expansión de este modelo, que ya cuenta con más de 50 centros acreditados en todo el país. La ciudad no solo ha ejercido de anfitriona, sino también de ejemplo, gracias al trabajo que desarrollan sus entidades locales en la reinserción de jóvenes a través de itinerarios formativos innovadores, colaboraciones con empresas y proyectos comunitarios.