Los residentes y propietarios de negocios dentro de la zona deben completar un formulario online con datos como la información catastral de sus plazas de garaje, una información que no se había requerido en restricciones anteriores. Unos datos que el Ayuntamiento asegura se utilizarán únicamente para verificar la propiedad de los espacios, si la plaza es alquilada, el propietario deberá autorizar a quien vaya a utilizarla, sin necesidad de presentar un contrato.
También existe inquietud entre los comerciantes, ya que los agentes municipales han solicitado el horario en el que los negocios harán uso de la zona, algo impredecible por ejemplo en el caso de los repartos.
Desde el Ayuntamiento se recuerda que el objetivo del periodo de adaptación de 6 meses que se ha fijado hasta la puesta en funcionamiento de los lectores de matriculas, responde precisamente a las dudas que puedan ir surgiendo entre los vecinos propias de la implantación de cualquier nuevo sistema.