Alerta en el campo de Castilla y León. Todas las alarmas se han encendido ante la propuesta de la Comisión Europea de reducir en más del 20% el presupuesto de la Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2028-2034.
Tanto el Gobierno autonómico como las organizaciones agrarias rechazan "con rotundidad" esta medida que afectaría directamente a miles de agricultores y ganaderos de la comunidad.
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, mostró ese "rechazo total" y anunció la convocatoria del Consejo Regional Agrario para el próximo martes, 22 de julio, donde se abordará el impacto de este recorte.
Sobre esta cuestión, Mañueco exige un presupuesto "fuerte, robusto e individualizado" para garantizar la viabilidad de las explotaciones agrarias.
Reacciones de las OPAs
Las organizaciones agrarias de Castilla y León también se pronunciaron sobre este asunto. Desde la UPA calificaron de “inaceptable” la propuesta y piden a los europarlamentarios que la frenen.
Por su parte, el coordinador regional de COAG, Lorenzo Rivera, expresó su decepción con la Comisión y reclama más apoyo real a un sector esencial para el medio rural. Lamentó que Europa haya elegido "las armas frente a los alimentos".
Eso sí, recordar que se trata de un primer borrador. Hay opciones de cambios, aún así el malestar en el campo es palpable y generalizado. La Junta y las OPAs coinciden en que el nuevo modelo debe respetar el desarrollo rural, evitando que la agricultura y ganadería se vean perjudicadas.